El Virus de la Actitud

El virus de la actitud es una infección que crece y puede causar grandes problemas y daños en la productividad en un equipo de trabajo en muy poco tiempo. 

Un equipo de trabajo esta compuesto por los siguientes personajes: 

• El Alterado: Exagera las situaciones y genera un clima de inseguridad. 

• El Perfeccionista: Exige de manera exhaustiva a los demás, emplea la calidad como un arma. 

• El Resistente: Este personaje se resiste a los cambios y estrategias que tiene pensado implementar la Alta Dirección , impactando negativamente en la productividad. 

• Ese No es mi Trabajado: Persona que se limita a realizar sus funciones, es incapaz de ver mas allá de sus propio trabajo. 

• El Rumoroso: Esparce rumores de manera constantes, sin fundamentos y negativos. 

• El No Comprometido: No se toma seriamente su trabajo, lesionando el entusiasmo y compromiso del equipo de trabajo. 

• El Pesimista: Todo lo percibe de manera negativa.

El virus de la actitud es muy dañino para la organización, los equipos, las personas, esta impacta directamente en la productividad. 

Una buena actitud hace la diferencia, para ello es necesario seguir estos pasos: 

• Reconocer que existe un problema de actitud: Hay que asumir la responsabilidad de su propia actitud y el impacto que tiene la misma. 
• Ayudar a que otros analicen su actitud: No enfocarse en la personalidad. sino en como la conducta de ese miembro esta afectando al equipo. 
• Mostrar como la conducta produce un impacto en las metas del equipo. 
• Responsabilizarse por las acciones, esto permite responder por las mismas, abriéndose a una selección  mas amplia de opciones. 
• En mucho de los casos no se tiene pleno o nada control de como resultan las cosas, pero si se puede escoger la manera de responder ante las mismas. 
• Reconocer las causas ocultas y ayudar a manejar esas causas: Muchas de estas causas ocasiona problemas de salud; dolores de cabeza, indigestión, presión arterial, insomnio, entre otros. 
• Ayudar a ver a los miembros del equipo a visualizar los valores y la manera en que ellos se relacionan con las metas del equipo, a fin de evitar que un conflicto entre las metas personales y las metas de la organización se convierta en un problema. 
• Remplazar las viejas reacciones con una nueva respuesta, una que se adopte mejor a la situaciones: Es necesario que el miembro del equipo entienda la importancia de cambiar su respuesta negativa, se debe estimular al equipo a practicar esa nueva actitud, libre de quejas/ criticas. 
• Evitar reincidir en la mala actitud: Es fundamental manejar las situaciones que producen tensión y darle seguimiento. 

La clave para atacar el Virus de la actitud, es la prevención, revisar constantemente la actitud del todo equipo.